La obra de remodelación y peatonalización de la Praza do Ferrol y su entorno, enmarcada dentro del proyecto Corazón Verde, llega a su fase final con la instalación del mobiliario urbano. “Está previsto que a partir de la próximo semana comiencen los trabajos de fijación de los 58 bancos de distintas tipologías diseñado bajo parámetros inclusivos que contribuirán a humanizar este espacio y todo el ámbito del proyecto con el objetivo de favorecer la diversidad de usos”, anunció esta mañana la alcaldesa Paula Alvarellos. En total habrá 42 estructuras colectivas facturadas en madera y acero con respaldo, 9 individuales del mismo material y 7 de hormigón blanco, sin sujeción dorsal, que serán instaladas en la zona de transición entre la praza y Amor Meilán.

Los elementos elegidos teniendo en consideración las peticiones del colectivo vecinal, así como su localización definitiva, responden a criterios técnicos en los que priman cuatro aspectos fundamentales: su funcionalidad, su versatilidad, el respeto por la estética del proyecto y su capacidad para generar espacios de socialización intergeneracional. “De hecho, el diseño de la tipología más utilizada, 42 unidades de los 58 totales, no solo permite el uso por parte personas con movilidad reducida, sino que su respaldo sobresale en uno de los extremos para facilitar el apoyo de sillas de ruedas, lo que a su vez permite compartir espacio con acompañantes o cuidadores. Asimismo, la versatilidad de estas piezas habilita el apoyo en ese respaldo de personas que no puedan o no se quieran sentar. Además, la estructura de acero de las patas quedan debajo de la superficie de sentado evitando así posibles tropiezos”, explicó la regidora.

Complementando este modelo, se instalarán otros 9 bancos individuales ensamblados con los mismos materiales y la misma línea estética para armonizar con el entorno. Cinco de ellos no tendrán sujeción dorsal mientras que los cuatro restantes contarán con respaldo. El nuevo mobiliario público de la praza se completa con otros siete bancos construidos en bloque de hormigón blanco que se colocarán en zonas de transición para proteger el desnivel entre la Praza y la rúa Amor Meilán y que permiten además un uso más versátil en una zona de paso.

La localización elegida tiene por objetivo generar áreas de estancia que favorezcan la socialización y que a la vez no impidan el transito de vehículos de emergencia o servicios especiales. Además, el factor climatológico fue muy tenido en cuenta por las personas técnicas. De este modo, un porcentaje de estos elementos serán fijados en zonas de sombra generadas por la arboledo con el objetivo de atenuar las altas temperaturas durante el período estival, mientras que otros se sitúan en zonas que reciben radiación solar durante el invierno.